Hemos ido a la primera clase con nuestos alemanes y después, a las 9, el director nos ha dado una charla de bienvenida en alemán (que nos la han tenido que traducir las profesoras y Manuel, porque únicamente entendíamos un par de frases).
Las clases eran bastante diferentes a las del Sagasta. Las pizarras se podían subir y bajar para que los profesores no se tuvieran que agachar o estirar al escribir. No había demasiados alumnos en el aula y el profesor podía explicar uno a uno lo que no entendían. La distribución de las mesas era diferente también, y cuando nos íbamos de clase teníamos que dejar las sillas sobre las mesas. Y las ventanas no tenían persianas ni contraventanas, únicamente unas cortinas.
Después de la charla del director, hemos ido con nuestras profesoras del Sagasta y la profesora de español (sin nuestros alemanes) a un pequeño centro comercial que hay cerca de la escuela y a una heladería a la que suelen ir en los recreos, donde las profesoras nos han invitado a un helado.
Tras el helado hemos vuelto a clase con nuestros alemanes y hemos estado pasando el rato en los recreos.
A la tarde algunos han salido a dar una vuelta en barca.
En las comidas nos siguen sorprendiendo cosas como que mezclan el zumo con agua o que no tienen hora para comer.
es estupendo el blog
ResponderEliminargracias a él nos enteramos de muchas cosas
y vemos unas fotos muy chulas
gracias
y a disfrutarrr